PLAZA HUINCUL 30/03/2006 - un año para planear -
ARROYITO 04/04/2007
“Ambos hechos muestran distintas estrategias,
pero una misma lógica. En un caso se utilizó un grupo paraoficial, con
militantes del partido gobernante y algunos desocupados, y se ordenó a la
policía liberar la zona para que actuaran impunemente. En el otro, el 4 de
abril del 2007, directamente se utilizó a la policía como fuerza de choque. En
ambos casos, la idea era dar un escarmiento y en ambos casos el abuso y la
ilegalidad estuvieron presentes en la actuación del Estado” (Ricardo
Mendaña - Página 12 05/04/10)
SOBISCH A JUICIO. IMPUTADO POR LA ZONA LIBERADA
PLAZA HUINCUL
El 04 de mayo de 2010 se conoció la resolución del
juez Elosu Larumbe, en la que resuelve NO HACER LUGAR a la solicitud de sobreseimiento
impetrada por la Fiscal Gloria Lucero y los abogados defensores de Sobisch.
Asimismo DECLARAR CLAUSURADA LA ETAPA INSTRUCTORIA Y ELEVAR para juzgamiento el
accionar de JORGE OMAR SOBISCH, imputándole haber impartido a la Policía
Provincial la orden de no actuar frente a una situación de inminente agresión
decidida por un grupo de personas integrado por presuntos afiliados a la UOCRA
y dirigentes del MPN.
LA RESOLUCIÓN DE ELEVACIÓN A JUICIO ES INAPELABLE.
Sin embargo a dos años y medio de aquella decisión del Juez Larumbe, la causa
esta próxima a prescribir.
·
Resumen de la Causa Plaza Huincul.
CAUSA PLAZA HUINCUL: antecedente de ARROYITO
/ SOBISCH imputado va a juicio
Un paso en el camino del Juicio y Castigo
En Noviembre de 2005, Sobisch intenta modificar la Constitución de la
Provincia con la intención de legalizar la entrega de los recursos naturales y
acotar los derechos sociales y laborales garantizados por los constituyentes de
1959, entre otras reformas no menos importantes. El debate político instalado
en la sociedad neuquina fue ganado por los que sostuvimos la consigna NO a la
Reforma.
Allí Sobisch sufrió el retroceso político más importante en su gestión
hasta ese momento. Se le obturó la posibilidad de consolidar su poder económico
y sus acuerdos con las petroleras y los sectores empresarios nacionales y
provinciales. Los intereses que movieron su gestión y la apoyaron vieron
derrumbarse sus aspiraciones de concretar en la letra de la Constitución
Provincial sus privilegios sobre el resto de la población.
A partir de allí y cegado por el resultado negativo de su aventura reformista
neoliberal, reforzó su política de enfrentamiento con las organizaciones
sindicales, sociales y políticas que exigían el cumplimiento de los derechos
sociales y laborales.
En ese contexto el conflicto educativo de inicio de 2006, intentaba romper
con el cepo salarial, de condiciones de trabajo instalado desde inicios de los
90 y el desconocimiento de las organizaciones sindicales.
El salario básico de los trabajadores de la educación de Nqn ocupaba el
lugar 16º a nivel nacional y se mantenía desde el año 1992.
En el Sistema Educativo Provincial había más de 3000 trabajadores en
negro (Planes Sociales, Contratados);
Las huelgas eran sancionadas con sumarios a los directores y descuento
de los días de paro;
Se cercenaba la actividad sindical reduciendo a su mínima expresión las
licencias gremiales.
Se desconocía, por el gobierno y los dirigentes de aten, la
representación de las organizaciones y se negaba cualquier posibilidad de
negociación. (más de 70 pedidos de audiencias sin respuesta)
Se había impuesto
el Presentismo a toda la administración pública como medida represiva y
disciplinadora de la creciente protesta social.
Estas son sólo algunas de las condiciones políticas en las que se
desarrollan los conflictos durante esos años.
Luego de más de 30 días de huelga y protesta en todos los rincones de la
provincia, finalmente resolvemos llevar el reclamo a las puertas de la
destilería de Repsol YPF de Plaza Huincul, aliado estratégico de Sobisch, según
sus propias palabras.
Durante ese conflicto y agotada toda instancia de reclamo ante las autoridades
provinciales, se consideró que era la afectación del sector productivo lo que
podía servir como elemento de atención y hacer visible ante la sociedad en su
conjunto el conflicto.
Sobisch no podía declarase vencido ante la tozuda voluntad de los
trabajadores y planificó una acción represiva que no significara la utilización
directa de la fuerza policial. Además debería poder presentarse ante la opinión
pública, como un acto de hartazgo de trabajadores, de la UOCRA y Petroleros en
defensa de sus puestos de trabajo.
El grupo parapolicial organizado estaba constituido por punteros del
partido provincial, desocupados, policías de civil y delincuentes comunes. Los
cascos amarillos fueron encontrados en la casa de uno de los cabecillas (un tal
Antío) y fue lugar de reunión el edificio de Acción Social Provincial. Las
viandas y viáticos para
los cascos amarillos, se prepararon en el Distrito Educativo Cutral Co. La
querella está en condiciones de probar que la operación se financió con dinero
del Estado la presencia de esas personas, que la persona que estaba a cargo del
grupo era el jefe de la seccional del MPN en Cutral Co y que no estaba afiliado
al gremio de la construccioón, que luego se encontraron los cascos, nuevos y
sin uso, en la casa de este señor; y que al grupo, a través del Consejo
Provincial de Educación, se los aprovisionó de alimentos.
Había un punto a resolver. La cercanía del puesto de la policía de
tránsito y la segura intervención policial ante la amenazante presencia del
grupo de los cascos amarillos, imponía una orden de no actuar y dejar hacer.
En este punto Sobisch no dudo. Llamó personalmente al Jefe de la fuerza
en la ciudad de Cutral Co y dio la orden de no intervenir. Luego lo ratificó
públicamente en el acto aniversario de la Policía Provincial, donde con
absoluta soberbia y seguro por entonces de la impunidad que lo rodeaba, se hizo
cargo personalmente de la orden impartida.
Para sorpresa de propios y extraños, la orden no fue acatada y aun
tarde, los jefes policiales incumplieron la orden y se evitó un perjuicio mayor
al provocado por la violenta irrupción de la patota parapolicial, que lesionó a
trabajadoras y trabajadores de la educación y destruyó bienes de quienes nos
manifestábamos pacíficamente. Los Jefes policiales Zambrano, Seguel
y Morales fueron sumariados y sancionados administrativamente por su
desobediencia. Finalmente se presentaron como querellantes denunciando al Ex
Gobernador por emitir una orden ilegal y contraria a su obligación de
garantizar la seguridad de personas y bienes.
A partir de la continua movilización contra la impunidad y la numerosa y
suficiente prueba acumulada. El juez ha considerado que existe sospecha
suficiente y razonable para considerar que JORGE OMAR SOBISCH es el presunto
autor de un delito.
"La reconstrucción histórica de los hechos ha quedado
suficientemente acreditada", dice la resolución judicial. Y continúa
"La policía no actuó pudiendo y debiendo hacerlo de manera preventiva;
la razón de esta inacción contraria a la ley obedece a las órdenes que
recibieron los jefes policiales de Cutral Co y Plaza Huincul por parte de sus
superiores; y el entonces gobernador reconoció públicamente que él era el
responsable de que la policía no haya actuado, y que fue él quien le dijo al jefe
de policía que no actúe". La policía no intervino. En el
auto de elevación a juicio, el juez Larumbe señala que la existencia de la
orden de no intervenir impartida a la policía está probada en base a numerosos
testimonios.
"La situación que se vivía (ese día en Plaza Huincul) era grave.
La alta probabilidad de que se produzcan hechos violentos era palmariamente
conocida. (…) No puede alegarse desconocimiento ni intenciones de mantener el
orden público y de preservar la paz social". Luego de dar por probado que Sobisch fue el que impartió la
orden a la Policía , el juez afirmó que "no se trata de una decisión
política no judiciable. Nadie puede ordenar a otra persona que viole la ley.
Ningún político por más alto que sea el cargo que ocupe puede ordenarle a la
policía que no cumpla con su deber preservando la integridad física de
determinados ciudadanos que se encuentran manifestando por sus derechos".
Es un paso fundacional hacia una investigación que de profundizarse,
puede sacar a la luz el plan armado por el Sobischismo para escarmentar la
protesta de los trabajadores y que tiene su punto más grave institucional,
política y socialmente un año después en Arroyito. La Zona Liberada de Plaza
Huincul del 30 de marzo de 2006, es el antecedente, el tubo de ensayo de lo que
finalmente fue el fusilamiento de Arroyito
En abril de 2007, bajo la misma dirección y supervisión, los actores
serían otros, directamente los grupos especiales sin ningún maquillaje. Los que
supervisaron el operativo Plaza Huincul, los Comisarios Zalazar y
Soto, son los mismos que planificaron, supervisaron y, ahora si, condujeron
desde el mismo lugar, el operativo de Arroyito. Sobisch una vez más se hizo
cargo públicamente. Ahora es tiempo de justicia, ahora es tiempo de condena,
ahora es momento de ponerle fin a la impunidad.
Por Carlos Fuentealba… Justicia!!!
Cárcel a Sobisch, Pascuarelli, Rinzafri, Soto, Aquiles González,
Salazar, etc.
Juicio y Castigo
Derrotar
la impunidad es fortalecer la democracia